El verde césped fue testigo de un partido que desafió cualquier pronóstico lineal. Lo que comenzó como un monólogo de la eficacia se transformó en un drama de volteretas, un reflejo puro de dos equipos que ofrecieron tanto brillo ofensivo como generosas concesiones defensivas. El ritmo fue vertiginoso, con transiciones rápidas que pintaban acciones de gol en ambos arcos, obligando a los guardametas a vestirse de figura una y otra vez. Al final, la balanza se inclinó por el que supo ser más certero, pero no sin antes dejarnos con el aliento contenido.

Manchester Tiki y la historia de siempre, los rivales contra ellos siempre convocan a Messi, Di María y Neymar, tremendo, así viene marcada la historia del team. Presentaron un gran plantel y un mejorado Salsa, pero no se pudo.

A La Tibia es una montaña rusa de emociones, arrancaron el año ilusionados pero terminaron el Apertura en el fondo de la tabla, y al tocar esa oscuridad, el team renació y ahora pelea por la copa y se ilusiona con el Clausura.